Sobre la obra:
La geometría del trigo fue, en un primer momento, un recuerdo de juventud que mi madre compartió conmigo. ¿Por qué quiso entregarme entonces lo ocurrido a unos amigos en nuestro pueblo del sur justo antes de mi nacimiento? ¿Qué debía hacer yo con esas palabras y esos silencios? Con el paso de los años el recuerdo de mi madre, transformado por la imaginación, se convirtió en un recuerdo propio, tan real como lo contrario.
La geometría del trigo es un viaje de norte a sur, de sur a norte, de ahora a entonces, y de entonces a ahora. Una historia de tránsitos y transiciones entre tiempos, espacios, lenguas y formas de amar. Y de fondo las últimas minas de plomo entre los olivares. Un intento de empezar de nuevo y de seguir juntos. Porque el vínculo nunca desaparece y siempre estamos a tiempo de cuidarlo.
Alberto Conejero